La avellana cruda es uno de los frutos secos más típicos.
En una dieta equilibrada los frutos secos son imprescindibles ya que nos aportan muchos nutrientes y beneficios para nuestra saludo.
Las avellanas crudas son ricas en omegas y en vitamina E que es antioxidante, ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro (buena para la piel ;)) son ricas en ácido fólico, ayudan a controlar el colesterol, la hipertensión y ayudan a mejorar la circulación. Además las avellanas son ricas en B6 y eso nos ayuda a proteger nuestro sistema inmunológico y aumentar las defensas.
Deberíamos de consumir todos los días un puñadito de frutos secos, un puñadito viene a ser unos 20gr más o menos. Añadirlos al desayuno o comerlos a medía mañana junto con una pieza de fruta puede ser una buena manera de hacerlo.
También podemos usarlos para cocinar, puedes picar unos poquitos y echarlos sobre los purés una vez emplatados o también añadirlos a las ensaladas e incluso a guisos o si te animas puedes hacer tus propias bebidas de fruto seco, en ese caso solo necesitas 2 ingredientes, agua y el fruto seco que decidas, con la pulpa que sobre puedes aprovechar y hacer untables o incluso galletas.
Descripción: Avellana cruda sin cáscara.
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