Las semillas de Lino, también conocidas como linaza, son muy ricas en fibra soluble. Además es de los alimentos más ricos en Omega 3. En nuestro Colmado siempre recomendamos molerlas, debido a su pequeño tamaño no es fácil masticarlas bien, y ya sabes que la digestión empieza en la boca. Recomendamos moler una cantidad no muy grande, guardarlas en un tarro y meterlo en la nevera para evitar su oxidación.
Tienen efecto antiinflamatorio, antioxidante y laxante.
Parece que ayuda a mejorar en casos de psoriasis, estreñimiento, hemorroides.
Las puedes moler en un molinillo de café o de especias, en las ferreterías son muy fáciles de encontrar este tipo de molinillos.
Hay quien deja las semillas de lino en remojo durante unas horas, así “sueltan” los mucílagos y se forma una especie de gelatina, después bebes ese agua con las semillas y ya estaría.
Si por otra parte eres de las nuestras, nosotras solemos añadirlas a los batidos, los yogures y las ensaladas. También puedes añadirlas a los purés o cremas, pero no cocinarlas para no perder el efecto de los omegas.
En los últimos tiempos, también se han hecho muy famosas en el mundo de las Curlys, las personas que siguen el método Curly las utilizan para hacer un gel fijador para el pelo.
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